Hay un lugar, en tu interior, lejos de tus miedos, lejos de las prisas, del qué dirán, lejos de las preocupaciones. Un lugar que te conecta con tu auténtico Ser y con todo el Universo, y hay una forma de llegar y estar allí:
ESTAR EN TU CENTRO:
Cuando comprendes que vivir es sencillamente
un –aquí- y un – ahora-.
Cuando dejas a un lado la carga del pasado y la preocupación por el futuro.
Cuando aprendes que tu salud es la forma que eliges de gestionar lo que piensas lo que sientes y lo que haces.
Cuando aceptas que tus lágrimas no son fracasos sino lecciones para crecer.
Cuando encuentras tu sitio en el Universo o la razón de tus pasos al caminar.
Cuando tienes el valor de aceptar tus propias contradicciones, las de los demás y seguir adelante.
Cuando descubres que eres el constructor de tu felicidad en el escenario de tus circunstancias
Cuando tu voz es el eco de tu fuerza interior.
Cuando sueltas el peso del rencor, la ira, el miedo y la pereza.
Cuando decidas escribir páginas de esperanza, ilusión y alegría en el diario de tu vida
y al cerrar los ojos te sientas bien por dentro,
habrás vuelto a tu hogar
y estarás en tu centro.
Antonio Marazuela